
En el blog de LambdaTres hemos hablado largo y tendido de la importancia del diseño integral de oficinas para motivar y potenciar la productividad laboral de nuestros empleados, pero ¿qué pasa con los directivos? Los miembros del equipo de dirección de una empresa o de una Organización también pasan largas horas de su jornada laboral entre cuatro paredes haciendo tareas de las que depende el presente y el futuro personal y profesional de toda la plantilla. Estos hombres y mujeres cargan a sus espaldas una gran responsabilidad, su principal función- la gestión empresarial – es sumamente exigente, sobre todo en los tiempos competitivos en los que nos ha tocado vivir. Así que hoy vamos a dedicar nuestro artículo a hablar de la importancia del despacho de dirección en la gestión empresarial de los directivos y las directivas, seres humanos de carne y hueso que también necesitan del diseño de interiores para mantener o mejorar su nivel de productividad.
Un espacio realmente funcional para la gestión empresarial
La principal premisa que debe cumplir un despacho de dirección es que se ajuste a las necesidades reales del empresario o directivo que lo va a ocupar. Ese espacio debe diseñarse para que ayude al ejecutivo a desarrollar sus funciones principales y ahí, lógicamente, entrarán en juego las tareas concretas que desarrolla esa persona en su día a día. Así, a la hora de diseñar ese espacio personalizado de gestión empresarial tendremos que dar respuesta a los siguientes puntos principales:
- La agenda diaria del ejecutivo: ¿el directivo pasa largas horas reunido con su equipo de colaboradores? ¿Debe realizar tareas creativas en solitario? ¿Ambas cosas? La agenda diaria del ejecutivo nos dará las claves principales para empezar a crear su espacio perfecto de gestión empresarial. Nos ayudará a tomar decisiones tan importantes como la creación de uno, dos o tres ambientes de trabajo dentro del mismo despacho, el estilo de decoración que mejor funcionará para llevar a cabo cada tarea ejecutiva (colores, mobiliario, texturas, materiales…), la necesidad de incorporar paneles fonoabsorbentes para favorecer la concentración, el estilo más adecuado de mesas y sillas de reuniones para esos momentos de trabajo colaborativo, etc.
- La comodidad. Una premisa que no debemos olvidar a la hora de diseñar el despacho perfecto para la gestión empresarial es el confort, la comodidad que ese directivo necesita disfrutar para poder dar rienda suelta a su productividad. Cuando hablamos de confort hablamos, también, de ergonomía, de mobiliario ergonómico que garantice que el empresario o el directivo se mantenga libre de esas temidas lesiones musculoesqueléticas producidas por la elección de una sillería innovadora y moderna, pero poco o nada saludable.
- El color. Hace ya varios años que los principales estudios sobre productividad en el entorno laboral hacen hincapié en el color como elemento clave para mejorar o empeorar la productividad del equipo de trabajo. Pasar largas horas rodeados de colores demasiado estridentes o excesivamente apagados puede pasar factura a la productividad real de esos hombres y mujeres que toman las decisiones finales en una empresa. Los colores en el entorno empresarial occidental cumplen una serie de funciones, por ejemplo:
El amarillo: estimula como ninguno la creatividad, las ideas brillantes, la comunicación y el trabajo en equipo.
El naranja: color vibrante que fomenta la energía, la toma de decisiones atrevida y la espontaneidad.
El azul: uno de los colores preferidos por las empresas y organizaciones más tradicionales. En nuestra cultura occidental el azul es un color frío que simboliza la diplomacia, la meditación y la frialdad a la hora de tomar decisiones importantes.
El verde: típico color que favorece la tranquilidad y la relajación en la toma de decisiones que implica la gestión empresarial.
¿Crees que un despacho puede afectar a la gestión empresarial? ¿En qué sentido? ¡Deja tu comentario en nuestro blog!